Caminando en el Desierto

Bamidbar - במדבר: "En el Desierto"  Torá : Números 1:1-4:20 Haftará : Oseas 2:1-22 Escrituras Apostólicas : Lucas 2:1-7; 1 Corintios 12:12-31; Romanos 9:22-33. Cuando los creyentes en Yeshúa inician sus estudios sobre la Torá, frecuentemente se hacen muchas preguntas con respecto a la forma en que el Señor envió Su mensaje de redención para toda la humanidad. Y es que este texto que se denomina Bamidbar, "En El Desierto," tiene para algunos muchas interrogantes. Entre ellas, si el Señor lo sabe todo, ¿porqué mandó a Moisés a que contara a los israelitas? ¿Porqué ese orden "militar" antes de entrar a la Tierra Prometida? Teniendo en cuenta de que Dios es omnisapiente, no cabe dudas que esta acción de contar a la población era para el conocimiento del pueblo de Israel. Al igual que cualquier estudioso de los textos Sagrados, los escritores de la Tradición Rabínica, también se hicieron algunas preguntas, tales como: ¿porqué la Torá fué dada a los israelitas en el desierto? De acuerdo a dicha tradición, existen un par de explicaciones que considero importante compartir. Los rabinos explican que, "así como las áreas del desierto no tienen dueño específico y son libres para la humanidad, así también las palabras de la Torá son libres y pertenecen a todas las gentes." [Números Rabbah 1:7] "Rashi comenta que porque Dios ama tanto al pueblo Judío, los contó frecuentemente: cuando dejaron Egipto (Exodo 12:37); después del pecado del becerro de oro, para saber cúantos quedaron después que los pecadores murieron (Ex 30:36); y ahora cuando puso Su Presencia entre ellos." [Tomado, adaptado y traducido al español de The Stone Edition Chumash, pg. 726]. "Rambam ofrece 3 razones por las cuales Dios quería contar al Pueblo: a) El milagroso crecimiento de la nación, la cual había llegado a Egipto como una familia de solamente setenta personas, pero que doscientos diez años antes, les mostró conclusivamente que Dios les amó mucho. Entonces, también, existió la necesidad de contarlos después de cada significante pérdida de la vida. Cada Judío es importante para Dios. b) Cada miembro de la nación tenía el derecho de beneficiarse de la atención personal de Moisés y Aarón, y el censo era una gran oportunidad para cada Judío de estar ante ellos, decirle su nombre y ser contado como un indivíduo de mucho valor personal. c) Desde que el pueblo estaba a punto de ir directamente a Eretz Yisrael- y si no hubieran pecado en el episodio de los espías (capítulos 13-14)- un censo era necesario para preparan un campaña militar y para saber cuata gente era elegible para recibir las porciones de la Tierra." [Tomado, adaptado y traducido al español de The Stone Edition Chumash, pg. 726]. Los escritores de FFOZ, en su comentario de Torah Club 1, nos dejan un mensaje muy interesante con respecto a Bamidbar: "El libro de Números nos cuenta la historia del viaje de los Israelitas desde el Monte Sinaí hasta Canaán. En el camino, los hijos de Israel enfrentaron pruebas y retos mientras avanzaban hacia su último destino: La Tierra Prometida.  Encontraron fallas y triunfos y aprendieron importantes e inlimitadas lecciones. El viaje de Egipto a la Tierra Prometida es una metáfora muy apropiada al viaje espiritual de la vida. Así como el viaje de Israel comenzó cuando Dios los liberó de Egipto, nuestro camino espiritual comienza con la Gran Salvación cuando nos encontramos con nuestro Mesías. Así como Dios trajo a Israel al Monte Sinaí, Mesías nos trae la revelación de la Torá. Así como la meta de Israel era la Tierra Prometida, nuestro último destino es la vida eterna en el mundo venidero. Entre aquí y allá, enfrentamos pruebas, juicios y toda clase de aventuras. Como los hijos de Israel, podríamos enfrentar guerra, tentaciones, descontento y sufrimientos agonizantes. Así como los Israelitas en el desierto, nuestros éxitos o fallas, son determinados por nuestra reacción a estas pruebas.     Pablo utiliza una metáfora similar. Compara la vida de la fe como una carrera de atletas. Los competidores de una carrera mantienen sus ojos puestos en el premio que está adelante (1 Corintios 9:24, 27). Aunque Pablo era en poderoso Apóstol y muy seguro en su salvación, no se consideraba como si ya hubiera llegado a su meta: 'Hermanos, yo mismo no considero haberlo ya alcanzado...prosigo hacia la meta para obtener el premio del supremo llamamiento de Dios en Mesías Yeshúa (Cristo Jesús)' (Filipenses 3:13-14) En su metáfora de la carrera, Pablo declara, 'Y todo lo hago por amor del evangelio, para ser partícipe de él.' (1 Corintios 9:23). Estaba preocupado en que, después de haber predicado a otros, finalmente quedara descalificado de la carrera. (1 Corintios 9:27). Si esos eran los sentiminetos de Pablo, cúanto más sería su preocupación por el premio que está adelante. El libro de Números ilustra los riezgos de esta carrera. La generación de israelitas que dejó el Monte Sinaí nunca llegó a la Tierra Prometida. El viaje de la vida espiritual está cargado de dificultades y peligros. Pablo dijo, 'Y también el que compite como atleta, no gana el premio si no compite de acuerdo con las reglas.' (2 Timoteo 2:5). Necesitamos tener nuestra mente empapada de las reglas de la Biblia para este viaje. Cada día, necesitamos volver a comprometernos a continuar, manteniendo nuestros ojos en la meta que está adelante.   Esto no significa que si los creyentes fallan, el Señor va a enviarlos a maldición. Él nunca envió a Israel de regreso a Egipto. Lo que quiere decir es que existen concecuencias por como nos comportamos, y existe un rico premio para aquellos que se mantienen en el camino." [Tomado, adaptado y traducido al español de Torah Club 1, Unrolling the Scroll-Bamidbar, pg. 540]. Como creyentes en Yeshúa y parte del Israel de Dios (Gal. 6:15-16), sigamos nuestro compromiso como tales, tomando en cuenta que, "Hay un solo cuerpo y un solo Espíritu, así como también vosotros fuisteis llamados en una misma esperanza de vuestra vocación; un solo Señor, una sola fe, un solo bautismo, un solo Dios y Padre de todos, que está sobre todos, por todos y en todos." [Efesios 4:4-6]. Con Amor en Yeshúa, Su Hermano y Amigo, René Oswaldo Jaco Líder del Ministerio Hispano de la Congregación Beth Adonai